Educación recula y ya no hará falta aprobar para obtener el título de ESO
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Educación recula y ya no hará falta aprobar para
obtener el título de ESO
Foto: Un examen a alumnos de entre 15 y 17 años. ÁNGEL NAVARRETE
Un alumno de 16 años podrá pasar a Bachillerato con una calificación final
de la etapa inferior al aprobado y con hasta dos asignaturas suspensas
Así lo dice un proyecto de real decreto al que ha tenido acceso EL MUNDO,
que el Gobierno aprobará próximamente y que contradice la Lomce
Mientras en las Cortes se trabaja para
alcanzar un pacto de Estado educativo, el Gobierno prepara
un nuevo cambio para desmontar otra pieza de la Lomce, esa ley inicialmente
concebida para elevar el nivel de exigencia en las aulas españolas. El
Ministerio de Educación ha redactado un proyecto de real decreto, a cuyo último
borrador ha tenido acceso EL MUNDO, que implica que los alumnos ya no tendrán
que sacar como mínimo un 5 en su calificación final para obtener el título de
graduado de la ESO, tal y como prevé la reforma educativa del PP.
En la práctica, esto supone que este
año, y hasta que se alcance un pacto de Estado, los estudiantes de en torno a
16 años podrán pasar al Bachillerato con una nota media de toda la
ESO inferior al aprobado y con hasta dos asignaturas suspensas.
Tampoco tendrán que aprobar la polémica reválida, que, tal y como prometió en octubre
Mariano Rajoy, no va a tener efectos académicos hasta lograr el anhelado
acuerdo.
La cosa, por tanto, va a quedarse más o menos como estaba con la LOE socialista,
que no obligaba a los alumnos a sacar una nota media de un 5 y les permitía
graduarse con una evaluación negativa en una o dos materias y
"excepcionalmente en tres", siempre y cuando "el equipo docente
considere que su naturaleza y el peso de las mismas (...) no les ha impedido
alcanzar las competencias básicas y objetivos de la etapa".
Ahora será un
poco más duro, porque sólo se podrá titular -un
requisito imprescindible para pasar a Bachillerato- con dos asignaturas suspensas, en vez de tres, pero por
el camino se han perdido las pretensiones iniciales del Gobierno de pedir una
reválida aprobada y una calificación final de toda la etapa de al menos un 5.
El cambio del 5 es muy reciente, tal y
como se desprende tras hacer una lectura comparada de diversos borradores en los que ha trabajado el Ministerio para
adaptar las condiciones de acceso a los títulos de la ESO y Bachillerato a esta
nueva situación en donde las reválidas ya no tienen efectos académicos.
En un borrador anterior al que ahora
revela EL MUNDO, se decía que obtendrían el título de graduado en la ESO
"los alumnos y alumnas que hayan obtenido una calificación final de la
etapa igual o superior a 5 puntos sobre 10 y una evaluación, bien positiva en
todas las materias, o bien negativa en un máximo de dos siempre que éstas no sean simultáneamente Lengua Castellana y
Literatura, y Matemáticas".
Esto es lo que expresa también la Lomce,
que sigue en vigor. Según fuentes educativas, el nuevo borrador "se
contradice" con esta norma porque ya no establece, como figuraba antes,
que los alumnos tengan que sacar una nota media final de al menos un 5. Sí se
sigue manteniendo, a cambio, todo lo demás: "Los alumnos y alumnas que
hayan obtenido una evaluación, bien positiva en todas las materias, o bien
negativa en un máximo de dos, siempre que éstas no sean de forma simultánea
Lengua Castellana y Literatura y Matemáticas, obtendrán el título de graduado
en Educación Secundaria Obligatoria".
Requisitos más duros
para bachillerato
El proyecto de real decreto aún tiene que someterse al examen del Consejo de Estado y del
Consejo Escolar del Estado antes de ser aprobado,
previsiblemente antes del verano, por el Consejo de Ministros.
Para los estudiantes que quieren
conseguir el título de Bachillerato, el borrador mantiene las mismas
condiciones que exige la Lomce: deben tener una "evaluación positiva"
en todas y cada una de las asignaturas de los dos cursos. Es decir, los
requisitos son más severos que con la ESO, donde los alumnos se gradúan con
hasta dos materias suspensas.
En el curso 2014/2015 (últimas cifras
disponibles), el alumnado que, al finalizar la ESO, era propuesto para el
título de graduado suponía una tasa bruta del 77,3% respecto de la población
que tiene la edad teórica de concluir este nivel educativo. Esto lleva a una
reflexión que probablemente también ha realizado el Gobierno: si se eleva el
listón para sacar el título, este porcentaje bajará. Y, en un momento en el que
España necesita como máxima prioridad reducir su elevada tasa de
abandono escolar, no conviene ponérselo más complicado a los
alumnos. Según datos anteriores, de 2011/2012, uno de
cada cinco graduados de la ESO consiguió el título con al menos una asignatura
suspensa.
"El Gobierno ya se ha bajado los
pantalones con las reválidas, ¡qué más da bajárselos un poco más con esto del
5!", expresan con amargura fuentes educativas, que insisten en la
necesidad de hacer evaluaciones comunes ajenas a los centros para homologar
competencias en toda España.
Otras fuentes reprochan al Gobierno "la imprevisión" con la
que está realizando modificaciones de calado como ésta: "Trastocar así la
normativa en el tercer trimestre... Es el tercer cambio legislativo en un mismo
curso y se aplicará ya este mismo año. Ni los estudiantes ni los profesores
sabrán cómo gestionarlo"
Con esta primera noticia damos comienzo a esta iniciativa.
ResponderEliminarTe invitamos a que nos des tu opinión respecto a ella
Palmira
Obviamente, lo que comentáis es cierto, si bien esto merece un análisis más profundo. Es decir, estas medidas, que ya de por sí son erróneas, lo que verdaderamente demuestran es que son la consecuencia de una política educativa errada arrastrada en el tiempo. Nótese que uso arrastrada no solo con el sentido de alargada, sino en el metafórico del desprecio y arrastre que ha sufrido la educación en todo este tiempo y que segura y desgraciadamente seguirá, dado que la educación y los profesores no son / somos valorados en absoluto.
EliminarNo en vano, los que estamos en la docencia sabemos que en la actualidad, y salvo excepciones, los docentes nos hemos convertidos en custodios de alumnos, los cuales no valoran y desprecian la formación y el saber (en muchos casos, al calor de lo que oyen en casa). Para no salirme del tema, los vaivenes en la educación en general y este despropósito en particular no vienen sino a intentar cubrir los errores anteriores. Y es que en verdad, pretender que los alumnos puedan aprobar con asignaturas suspensas supone un torpedo más en la línea de flotación de las múltiples oportunidades que se le dan a los alumnos, que en muchos casos no quieren aprovechar esa misma oportunidad que sus padres no tuvieron sencillamente porque ellos ya lo tiene todo, a diferencia de lo que les sucedió a sus progenitores, quienes ciegos creen que darles lo que quieren sin merecérselo les acercará más a sus hijos o les quitará de la responsabilidad de educarlos.
Por otro lado, este sistema educativo nuestro está tan desgastado y prostituido que pocos ciudadanos son conscientes de las enésimas oportunidades que los alumnos tienen y que desperdician (a cuenta de los impuestos de tod@s, dicho sea de paso), y que ya hemos llegado al punto de que no se puede rebajar aún más el sistema de exigencia. Hace unos días, un conocido juez de menores planteaba una pregunta que suscribo al cien por cien, y que dejo aquí a modo de reflexión: "¿Dejaría usted que le operase un cirujano que suspendió alguna asignatura?". La respuesta es evidente, "no", pero claro, los médicos aún no están tan mal vistos como los docentes, aunque tiempo al tiempo...
Hoy en día todo el mundo opina que debemos imitar el modelo finlandés, o noruego, o danés, y coincido en inspirarse en lo bueno de cualquier idea que contribuya a mejorar, pero también deberemos copiar otras cosas… (los puntos suspensivos, los docentes saben a lo que me refiero), ¿o solo se insiste en las medidas que nos interesan?
Además, la educación no es cuestión de exigir a los profesores más profesionalidad (¿más?, me pregunto yo), o de pedir más medios (con algunas excepciones, los centros están hoy más o menos bien dotados), o de pedir más horas de matemáticas o menos de religión, sino de pedir a los políticos que dejen de usar la política como arma adoctrinadora y se dejen asesorar por los que saben (ya sé que es una utopía, pero me ha salido la vena soñadora), de pedir a los padres que se impliquen en la educación de sus hijos, de SUS hijos, sí, los de ellos, no los nuestros.
Y todo este rollo porque pretendo demostrar que esta noticia no es una medida aislada, sino que es la consecuencia de este breve análisis que he mencionado (y muchas otras ideas más que estaré encantado de compartir con quien quiera y haya llegado leyendo hasta esta parte final).
Gracias
En mi opinión, y leyendo estas noticias (que en poco o nada nos sorprenden ya) creo sinceramente que una de las asignaturas pendientes de nuestros políticos en este país, es la educación. Es evidente que mientras no se consiga un Pacto de Estado educativo, todas las leyes que se van sucediendo acaban siendo un fracaso, y así lo demuestran año tras año las estadísticas comparativas con otros países de nuestro entorno europeo.
ResponderEliminarEl problema no es "educativo", sino político, dado que la educación, como sucede con la sanidad, etc. es utilizada como "arma política", y eso acarrea estas consecuencias. hemos sido incapaces en décadas de democracia de hacerles entender a nuestros representantes políticos que hay temas como estos que están por encima de ideologías (si es que hoy en día podemos considerar que nuestros políticos tienen "ideología"). Por tanto, también es un fracaso de la propia sociedad española en su conjunto.
Esta nueva "propuesta" conlleva simple y llanamente (y es una opinión personal) seguir bajando el nivel de nuestros estudiantes, para conseguir....¿qué?
Quizás algún día sepan explicárnoslo.
Domingo
Comenzamos con esta importante noticia, dada la trascendencia que tiene para la educación.
ResponderEliminarDe hecho, esta noticia sobre el Proyecto de Real Decreto ha sido recogida, en términos muy similares, por la más diversa prensa.
Medios de comunicación de difusión nacional: La sexta, RTVE, ABC; medios regionales: El diario de Sevilla, Melilla Hoy, Levante-EMV, Cantabria liberal,…; e incluso medios digitales especializados en educación: Orienta guía, Santillana, The family watch…
Evidentemente nos encontramos ante un hecho de gran relevancia para la educación de nuestros adolescentes, por ello la prensa se ha hecho eco de ello.
Los que estamos vinculados con el tema de la educación estamos curados de espanto o al menos yo ya he perdido la capacidad de sorpresa...
ResponderEliminarEs increíble, ¿cómo comentar esto? Lamentable.
Y mientras tanto vapuleando lo más importante de un país: la educación es el futuro.
Esta es una triste y decepcionante noticia...
ResponderEliminar1. Noticia redactada en idioma "politiqués correcto" con las típicas y buscadas expresiones "no sexistas" como por ejemplo desdoblamientos de género en lugar de utililzar el genérico plural masculino, palabras neutras como "alumnado",... etc.... lo que demuestra, efectivamente, lo mal que lleva estando, desde hace varias décadas ya, la educación en España que ofrece al mercado "periodistas" que a penas saben utilizar correctamente su principal herramienta de trabajo...
ResponderEliminar2. Efectivamente este asunto es un drama que está teniendo devastadoras consecuencias porque la educación ha sido siempre el principal objetivo de los gobiernos corruptos y amorales: sustraer la libertad del individuo, dejándolo sin alma, a expensas de sus fauces aniquiladoras, de manera que sea el Estado quien asuma el papel parental para poder así modelar un verdadero rebaño de mansos y estúpidos corderos. Un individuo hecho según las necesidades del Estado: sin espíritu, amoral, que se dedique a sufragar con los impuestos que injusta e inmisericordemente se le cobran un dispendio autonómico montado por y para la corrupción, un latrocinio con nombres y apellidos por el que nunca pagan los malhechores.... Un pago que debe ser realizado en silencio, sin rechistar y bajo la amenaza de ser tachado de insolidario en lo que se configura como una gran mentira, una gran estafa de dimiensiones inconmensurables. Con este panorama no es de extrañar que cada una de las pirañas autonómicas haya querido siempre tener su propia ley educativa, para asegurarse su porción de rebaño de gansos y burros.
3. Con este panorama es imposible que un Estado tan elefantiásico como el de España pueda procurar una educación de calidad porque iría contra sí mismo... Sería algo así como si una gran empresa eléctrica inventara un pequeño panel solar, del tamaño de un cuaderno y que vendiera por un módico precio, para que la gente lo pusiese en el tejado de su casa y ya no necesitara contratar una tarifa eléctrica.
4. Los hijos de estos miembros de las clases dirigentes siempre son educados en sistemas privados extranjeros de élite con enseñanzas verdaderamente bi- o tri-lingües... (aunque tengan sucursales en España) garantizando la protección de sus vástagos de la intoxicación a la que aquí estarían expuestos.
5. La solución a esta catástrofe jamás puede provenir de aquellas castas que la han ocasionado sino de otras concepciones radicalmente diferentes y, por ende, proscritas en todo medio de comunicación que se precie de querer seguir siéndolo.
6. Por cierto, no estoy de acuerdo con uno de los comentarios que afirma algo así como que "los políticos no tienen ideología".... Pues hay unos cuantos que sí que la tienen, y muy clara, frente a otros que no la tienen en absoluto y cuyo fin no es el de vertebrar la sociedad sino la de aguantar en el puesto dos, tres o cuatro años más... los justos como para que les de tiempo para comprar a unos cuantos jueces y poder asegurarse así su futuro fuera de la cárcel, ultimando alguna puerta giratoria para él, sus hijos, primos, amigos y cuñados. ¿Qué les importará a estos culiparlantes el resultado social de sus experimentos educativos si para entonces ellos ya no estarán ocupando cargo alguno?
7. Me voy a permitir una pequeña profecía: dentro de poco ya no serán necesarios los 5´s o 4´s como notas de aprobado o suspenso porque ya no habrá exámenes, poco después tampoco habrá notas, ni deberes.... un poco más adelante ni siquiera habrá que asistir a las clases hasta que por último, no habrá ni siquiera profesores... Y entonces ya no habrá nada, ni siquiera temario porque no quedará civilización... tan sólo una mugrosa estirpe de tribus, asilvestrada, ágrafa completamente haciéndose realidad el sueño de una infausta diputada de sobacos malolientes de cuyo nombre, afortunadamente, ni me acuerdo.
8. Había olvidado la última: El objetivo, efectivamente, es bajar el nivel educativo al máximo porque así aprueba más gente. Con ello, esta casposa casta se asegura dos cosas: la primera, rentabilidad electoral vendiéndolo como objetivo cumplido ("¡ con nosotros hay más universitarios que nunca!" como si eso fuera en sí mismo un factor positivo cuando podría ser incluso negativo.... pero eso es otro debate) y la otra, esta es la más perversa, reducir la masa crítica ciudadana que pudiera cuestionar y poner en peligro el sistema extractivo que tiene impuesto la élite.... o dicho de otro modo, "sé una buena oveja, dedícate a votar cada cuatro años, a pagar tus criminales y sempiternos impuestos y.... ¡a callar que te tenemos que seguir exprimendo hasta la última gota de tu sangre!".
EliminarTras pensar y seguir dándole vueltas al tema quería añadir otras consideraciones:
ResponderEliminar- El mensaje para los alumnos es el de que el sistema no cree en ellos. Se les dice implícitamente "Sois unos discapacitados y no vais a ser capaces de aprobar todo, por lo tanto nos vale con que aprobéis unas cuantas porque sois unos mediocres".
-También se trata de una humillación a los profesores por parte del Gobierno porque el mensaje que se les manda es que hay dos de sus asignaturas que les importa un bledo al Gobierno y que da igual que los alumnos las aprueben o no; el resultado es una desmotivación absoluta por parte de los profesores.
-Y, por último, los alumnos tampoco tendrán motivación alguna porque decidirán de antemano que van a suspender un par de asignaturas y se querrán evitar el sacrificio de prestar atención en clase y estudiar para aprobar porque....¿para qué, si va a dar igual si se suspende? Las clases estarán sin duda animadísimas.
Cerramos los comentarios a esta noticia. Muchas gracias por vuestra colaboración, verdaderamente vemos que estamos despertando los pensamientos críticos.
ResponderEliminarEsperamos poder seguir contando con vuestras aportaciones.
Un saludo